Páginas

3 de febrero de 2011

Inteligencia Artificial (Claudia y Carola)

Inteligencia artificial
Es sorprendente el avance tecnológico que la humanidad ha experimentedo en los últimos dos siglos. Su expresión más acabada, se encuentra en la invención de ordenadores, "máquinas que piensan", cuya rapidez y asombrosa complejidad ya no es un secreto para nadie.
La inteligencia artificial es una ciencia, una rama del conocimiento, que trata la compresión de la inteligencia y el diseño de máquinas inteligentes, es decir, el estudio y simulación de las actividades intelectuales del hombre.
Algunos expertos sostienen que los ordenadores poseerán capacidades y habilidades similares o superiores a las de los seres humanos.

Alan Touring, matemático, informático teórico, criptógrafo y filósofo inglés, es cosiderado el padre de la inteligencia artificial por desarrollar una investigación sobre la inteligencia y capacidad de los ordenadores. Ya en los años 50 se planteó la posibilidad de que fueran tanto o más inteligentes que los humanos, pero descartó esta idea exponiendo la "Prueba de Touring" en la revista Mind. Ésta prueba consiste en que la máquina se hace pasar por una persona y ha de entablar una conversacion tipo chat con una persona real; a dicha persona no se le informa si es humano o ordenador y debe determinarlo por si mismo. En caso de que advierta que es un ordenador, se considera que este no tiene inteligencia suficiente, y hasta ahora no hay ninguno que haya superado esta prueba, aun que poco a poco se van acercando.
Sí bien es cierto que los críticos tienen opiniones encontradas al respecto, ya que los hay que alegan que existen personas que no son capaces de apreciar si es una persona o una máquina, y otros afirman que para que la prueba sea fiable, la persona que ha de determinar quien o que está hablando, ha de tener nociones básicas técnicas para percatarse.
Aunque existen otras variantes de esta pruebla, no acaban de solucionar esta cuestión. Y muchas personas piensan que el test ya ha sido superado.

Por otra parte, las formas de inteligencia artificial existentes actualmente son, en su mayor parte, los denominados chatbox, aunque en estos últimos años han aparecido sistemas de inteligencia artificial desarrollados con fines terapéuticos y de transporte, mejorando la operación y seguridad del transporte terrestre en carreteras urbanas y rurales, y en los ferrocarriles. Su uso más extendido quizás sea el del cobro electrónico del peaje o la vigilancia automática de las infracciones.




Lo que realmente esta ciencia quiere conseguir, es imitar a una persona, no su cuerpo, sino su cerebro, en todas sus funciones, existentes en el humano o inventadas sobre el desarrollo de una máquina inteligente.
A veces, aplicando la definición de inteligencia artificial, se piensa en máquinas inteligentes sin sentimientos, que 'obstaculizan' encontrar la mejor solución a un problema. Muchos pensamos en dispositivos capaces de concluir premisas a partir de otras dadas, sin que ningún tipo de emoción obstaculice dicha labor.
Ya existen, como bien hemos dicho antes, sistemas inteligentes capaces de tomar decisiones 'acertadas'.
Aunque de momento los investigadores se centren en el aspecto racional, muchos consideran la posibilidad de incorporar componentes 'emotivos', para aumentar la eficacia de los sistemas.
Al tener sentimientos, se podrá actuar de acuerdo con sus intenciones, por así decirlo. Así se podrá equipar un robot con dispositivos que controlen su medio interno, por ejemplo, que 'sientan hambre' al detectar que su nivel de energía esta bajando. Incluso se podría introducir el 'dolor' o el 'sufrimiento físico', para evitar torpezas de funcionamiento, como por ejemplo, introducir la mano en una cadena de engranajes o saltar a cierta altura, lo que provocaría daños irreparables en la máquina.
Esto significa que los sistemas deberán ser dotados con mecanismos de retroalimentación, que les permita tener conocimiento de estados internos, al igual que en las personas.
En resumen, lo racional y lo emocional están tan relacionados entre sí, que se podría decir que son, hasta cierto punto, complementarios.
Todo esto, claro está, que vendrá en un futuro no muy lejano.
Las principales críticas a la inteligencia artificial tienen que ver con la incapacidad de imitar por completo a un ser humano. Aunque estas críticas ignoran que ningún humano individual tiene la capacidadpara resolver todo tipo de problemas, y autores como Howard Gardner han propuesto que existen inteligencias múltiples. Un sistema de inteligencia artificial deberiía resolver problemas; por lo tanto, es fundamental en su diseño la delimitación de los tipos de problemas que resolverá y la estrategias que utilizará para ello.
En un humano, la capacidad de resolver un problema tiene dos aspectos: los innatos, que permiten, por ejemplo, almacenar información en la memoria; y los aprendidos, el saber resolver un problemaa matemático mediante el algoritmo adecuado.
De la misma manera que un humano debe disponer de herramientas que le permitan solucionar problemas, los sistemas artificiales deben ser programados de tal manera que puedan resolver ciertos problemas.

El futuro y consecuencias de la Inteligencia Artificial
El chatterbot es un programa que pretende simular una conversación escrita, con la intención de hacerle creer a un humano que está hablando con otra persona.
Estor programas informáticoas prometen ser el futulo de la IA. En el futuro podremos ver como a estos actuales bots se les unirán las tecnologías del reconocimiento de voz y el de vídeo.
El cerebro humano tiene 100.000 millones de neuronas. Un programa de ordenador puede simular unas 10.000. Si a la capacidad de proceso de un ordenador le sumamos la de otros 9.999.999 ordenadores, tenemos la capacidad de un proceso de 10.000.000 ordenadores.
Multiplicamos 10.000.000 ordenadores por 10.000 neuronas y cada uno daría 100.000 millones de neuronas simuladas. Un cerebro humano será simulado en el futuro gracias a la tecnología, y cualquiera podrá programarlo.
Una vez que la inteligencia artificial tenga una inteligencia igual o superior a la del hombre, surgirá un cambio político y social, en el que la IA tiene todas las de ganar si se da cuenta de que no necesita a los humanos. Puede que suene a ciencia ficción, pero esto, al igual que el gran avance de la tecnología que antes, ni se imaginaba, puede suceder.


Vídeo

2 comentarios:

  1. Es francamente interesante lo que contáis. Sin duda seguís una secuencia muy coherente en el artículo y organizais la información de una manera muy lógica y bien estructurada.
    Hay varios errores tipográficos que afean la lectura.
    Echo de menos los vinculos a las fuentes consultadas así como la cita a las mismas.

    ResponderEliminar
  2. Dos observaciones más:
    - No se ponen los nombres de los autores en el título.
    - Los vídeos quedan mejor insertados.

    ResponderEliminar