En los últimos años, en estos tiempos más difíciles de lo normal, las ciencias experimentales han perdido más de un 30% de alumnos, en concreto, desde 1997. Las facultades que han experimentado una decrecimiento de alumnos en sus filas, son las facultades encargadas de la enseñanza científica, como lo son las de biología, física, química e incluso añadiendo también las de matemáticas. En particular, el campo de la química, la física y las matemáticas son los que han sufrido una mayor pérdida de interesados. La baja de alumnos es tan grave, que en ciertas universidades, estas carreras han estado a punto de ser retiradas.
Personas con cargos importantes en los campos de las ciencias españolas, como los son María Josefa Yzuel, vicepresidenta de la Real Sociedad Española de Física, y Joan Ángel Pardó, presidente de la Conferencia de Decanos de Física, han declarado que les preocupa enormemente la falta de alumnos y que los avances tecnológicos se basan en el desarrollo de las ciecias básicas. Se asegura también, que esta baja de alumnado afectarña al objetivo de la Unión Europea de aumentar el personal de I+D.
Hay ciertos aspectos relacionados con todo esto que ya se pueden apreciar en nuestro país. Para empezar son las universidades pequeñas las que más están sufriendo estas pérdidas de alumnado, poniendo como ejemplo a la Facultad de Ciencias de Orense en la que en el año 2009 solo se matricularon ocho alumnos en el curso de Física. También va a ocurrir, y está comenzando a pasar, que los investigadores que haya en nuestro país serán la mayoría extranjeros, al no ocupar esa plaza investigadores españoles dado que muy poca gente estudia ya ciertas ramas científicas.
Fuente: http://www.publico.es/
Se podría decir que esta pérdida de vocación científica viene ya desde pequeños. En un artículo de e-ciencia María Docavo, licenciada en Química, nos explica que existe una falta de interés por lo que sucede a nuestro alrededor. La gente de hoy en día no se pregunta como funcionan muchos aparatos y mecanismos que utilizamos diariamente y simplemente se contentan porque funcionen. En cierta medida esto es debido a la sociedad en la que vivimos, ya que nos ofrecen todo para que lo utilicemos y disfrutemos directamente, no nos dan la oportunidad en muchas ocasiones de hacer las cosas por nosotros mismos, como en el ejemplo del artículo, el cual dice que hoy en día cuando compramos carne la compramos en una bandeja, sin embargo bastantes años atrás, nuestros abuelos y bisabuelos y generaciones anteriores tenían que prepararse muchas veces ellos mismos la carne para después poder cocinarla.
Como curiosidad, el profesor titular de Periodismo en la Universidad Carlos III de Madrid y su vez licenciado en Químicas, Carlos Elías tiene como obra culmen su estudio sobre el declive de la ciencia en Occidente. “La razón estrangulada”, su obra, ofrece una visión apoteósica del estado de la ciencia en Europa en general y en España, en particular. En el libro aporta algunas causas que explican por qué la ciencia no crea tanto interés entre los jóvenes en la actualidad. Por ejemplo en el libro dice que el cine y la televisión han provocado que la ciencia quede en segundo plano, con películas como Harry Potter o programas como Cuarto Milenio en los que la magia y lo inexplicable prevalece sobre la ciencia. A su vez, los personajes científicos de las series de televisión no parecen ser un ejemplo a seguir, como el Doctor House. Otra causa que explica Elías en el libro es la percepción del científico por parte de la sociedad como algo malo para la misma, ya que ellos han sido los creadores de armas tan peligrosas como la bomba atómica.
Pero quizás quien tiene la mayor parte de culpa de que no haya suficiente vocación profesional entre los jóvenes para llegar a ser científico la tienen los propios científicos. Según Joan Guinovart, presidente de la Confederación de Sociedades Científicas de España, los científicos han fracasado a la hora de "vender" la ciencia, y en su opinión lo han hecho dando a entender que es algo aburrido y no han llegado a fascinar a los jóvenes. Por ello es necesario que se promocione con actividades y programas que creen un espíritu científico en las futuras generaciones.
Guillermo Domínguez y Lucas Fernández
FUENTES:
Una noticia interesante que nos aporta información de algo que la mayoría no estamos totalmente enterados. Yo, personalmente, conocía el problema pero no conocía su magnitud; y por lo que parece puede llegar a ser un gran problema, sobre todo para nuestro país.
ResponderEliminarCreo que tienen toda la razón diciendo que una de las causas principlaes de la falta de alumnos que estudien estas ciencias es que la sociedad nos hace ver a los científicos de un modo que no es el que nos gusta, y nos hacen creer que eso no es lo que queremos estudiar. Pero creo que otra razón es que la gente hoy en día se fija mucho en el dinero, y para la sociedad ser científico no equivlae a ganar mucho dinero; una causa muy triste pero verdadera.
Por ello estoy de acuerdo con el final de la noticia que apunta que la ciencia debería venderse mejor, realizando actividades como las que aparecen en el video final para reclutar a más jovenes ansiosos de ciencia.
Esta noticia me ha impactado, la verdad nunca podría haber imaginado la importancia de este problema y la magnitud del mismo. En mi opinión, estoy de acuerdo con lo que se ha mostrado en el artículo y me entristece mucho que esto sea así, pero en el mundo de hoy en día, lo único que importa es el dinero y no podemos hacer nada para cambiarlo. Aun así muy buena idea el vídeo del final del artículo para concienciar a más jóvenes.
ResponderEliminarMe parece un tema más que interesante para el artículo. Estoy de acuerdo con Alejandro y Dani, la ciencia es fundamental y no debe de ser potenciada simplemente por intereses económicos. Con la crisis los presupuestos en I+D+I se han reducido hasta el punto de ser casi congelados y esto es una vergüenza ya que, junto a educación y sanidad, es una de las áreas más importantes.
ResponderEliminarLa ciencia debe venderse. Como bien dicen mis compañeros, es importantísimo reclutar jóvenes científicos.
No podemos permitir que absolutamente todo se mueva por intereses económicos.
Me ha parecido muy interesante el artículo, nunca me había planteado este problema, y en el artículo lo habeis expuesto claramente, citando ejemplos particulares y datos curiosos que hacen más interesante la lectura del artículo. Tiene muchos vínculos que nos ayudan a ampliar la información. Creo que es un buen artículo.
ResponderEliminarGran trabajo. Estoy de acuerdo con Daniel Hernán, da rabia que el mundo en el que vivimos sea como es, y es cierto, poco podemos hacer para cambiarlo. Por otro lado, muy bien redactado y muy interesante. Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarMuy buen artículo, muy interesante el tema que habéis tratado.
ResponderEliminarEstá redactado de forma muy clara.
Me ha parecido muy interesante el tema de citar ejemplos actules pero, sobre todo, propios, particulares.
Las imágenes y el vídeo hacen una lectura más amena y, sobre todo, nos crea interés por él.
Buen artículo. En mi opinión la mayoría de la gente ve en carreras como Física, Matemáticas o Biología carreras difíciles, aburridas y que no le van a reportar el mismo beneficio económico que otras carreras realizando mucho más esfuerzo. El dinero prima, por lo que también lo hacen las carreras que aparentemente pueden hacer que ganes más dinero.
ResponderEliminarEsto es lógico en el mundo en el que vivimos, pero no deja de ser preocupante. Primero porque los avances cinetíficos pueden verse reducidos drásticamente con los años, y segundo porque, como habeis explicado en el artículo, estas carreras pueden llegar a desaparecer en algunas facultades.
¡Interesantísimo!
ResponderEliminarEs una pena que los jóvenes hayan dejado de preguntarse por aquello que les rodea y de tener un espíritu científico, curioso e interesado por materias como la física, la química, las matemáticas o la biología (que nos ayudan a entender el universo del que formamos parte).
En mi opinión, una de las razones por las cuales esto esta ocurriendo en España(que no habéis mencionado), es que se invierte muy poco en investigacion científica.
Esto es algo que no logro comprender, pues sin investigación no hay ni avance ni progreso, que son ingredientes imprescindibles para el crecimiento y el desarrollo de un país.
La investigación científica es cara, pero también rentable. No debemos olvidarlo, pues dejar de invertir en investigación desencadena una pérdida de interés por parte de los jóvenes a la hora de estudiar ciencias, al verse poco motivados.
Me ha parecido muy interesante este artículo, creo que nos va a ser muy útil teniendo en cuenta el curso en el que estamos ya. No conocía este problema y lo habéis expuesto de forma clara y haciéndolo más ameno citando ejemplos y estudios específicos.
ResponderEliminarMe ha llamado la atención la parte en la que decís que la televisión o el cine relacionados con la magia han desbancado a la ciencia, puesto que realmente es necesario conocer campos científicos específicos para poder realizar trabajos de ese tipo.