Certificados digitales

En este artículo, vamos a tratar un tema bastante novedoso en este nuestro mundo contemporáneo, que son los certificados digitales y los DNI's digitales. También conocido como certificado de identidad, un certificado digital es un documento digital que garantiza la relación entre un sujeto y un sistema de dos claves de seguridad, una pública y otra privada.

Gracias a este conjunto de certificados, es y será posible minimizar la diferencia burocrática, es decir, permitirá reducir el número de pasos administrativos que tanto tiempo nos hacen perder hoy en día. A partir de ahora, podrás firmar documentos a distancia (digitalmente) o mediante dispositivos USB.

Ahora que ya sabemos su utilidad principal, aquí tenemos un vídeo en el cual se explica de forma muy detallada y fácil de comprender cómo hacerse un certificado digital:

Por si no os es posible ver el vídeo desde esta misma página web aquí lo tenéis. Para continuar, son necesarios unos criterios mínimos para establecer lo que es un certificado digital y lo que no. Para en un futuro no ser engañados, un certificado debe de contener la identidad del propietario, la clave pública asociada al mismo, la identidad de la entidad que firma el certificado y el algoritmo que se usó para realizar el proceso. Si no contiene alguno de estos puntos, no puede ser considerado como un certificado digital.

En palabras mayores, lo que nos aporta este certificado es la seguridad y privacidad suficiente para sentirnos libres de actuar por Internet usando estas claves, gracias a las cuales el proceso de comercio virtual es mucho más seguro.

En otro orden de cosas, el funcionamiento de dichos certificados es bastante simple, a pesar de lo difícil que pueda parecer en un primer momento. Está compuesto por dos claves: una pública, a la cual cualquier otro usuario puede acceder; y una privada, la cual debe de ser protegida por el sujeto, ya que tiene que ser el único que conozca cual es. A través de la clave pública, podemos verificar todos los movimientos realizados con la clave privada, o se puede encriptar mensajes, los cuales solo podrán ser desencriptados por la clave privada. A través de la clave privada, aparte de desencriptar dichos mensajes, se pueden realizar todas las aplicaciones que nos ofrece el certificado digital. A fin de cuentas, todo el funcionamiento se basa en esto.

Para profundizar un poco más en el tema, podemos analizar los distintos tipos de certificados. Existen cuatro distintos, aunque solo tres de ellos están pensados para individuos, reservando así el cuarto para negocios. El Certificado Digital de Clase 1 provee el nivel de confianza  suficiente para navegar por Internet. El Certificado Digital de Clase 2 provee seguridad suficiente para hacer compras o suscripciones en línea. Por último, el Certificado Digital de Clase 3 provee de un nivel mayor de seguridad, que debe de ser revisada por un notario, y que nos permite mover dinero por Internet sin temor alguno.

Tras haber hablado en profundidad de los certificados digitales, toca hablar de la segunda parte del trabajo, los DNI's electrónicos, que son la última evolución del Documento Nacional de Identidad. En este documento, y durante los últimos 50 años, se han incluido los datos más personales de una persona, desde su identidad a su nacionalidad, pasando por nombres y apellidos. He aquí un ejemplo de DNI electrónico:

Las características fundamentales de este nuevo DNI son las siguientes:

• Es mucho más seguro porque incorpora medidas de seguridad más sofisticadas, garantiza la identidad del portador e imposibilita su suplantación o falsificación.
• Es mucho más cómodo porque se pueden realizar operaciones de todo tipo a distancia y en cualquier momento, se obtendrá de una sola vez, sin tener que ir dos veces. Además, se podrá actuar sin tener que portar ningún otro tipo de documentación.
• Por último, es mucho más resistente (se prevé que dure unos diez años) y mantiene las medidas estándar de tarjeta de crédito.

Gracias a estas características, existen un montón de aplicaciones prácticas, de las cuales resumiremos las más importantes. En primer lugar, nos permite, como ya hemos mencionado antes, realizar compras e interacciones económicas a través de Internet. Por otro lado, también nos permite realizar trámites completos con las Administración Pública o Ayuntamiento sin tener que desplazarnos, entrar al edificio donde trabajamos o participar en conversaciones online asegurando la identidad del que está al otro lado del ordenador.

En un mundo cada vez más digitalizado, la inclusión de nuevos aparatos que gocen de aplicaciones electrónicas garantizando nuestra seguridad es fundamental para seguir avanzando hacia una vida más cómoda y, por supuesto, más segura. Por tanto, nuestra opinión es bastante clara sobre este tema. Cuanto más profundicemos en medidas de seguridad y de comodidad como ésta, más nos aproximaremos a lo que puede considerarse como estado de bienestar. Sin embargo, hay que tener mucho cuidado con la suplantación de este tipo de claves, porque al conocer dicha clave ya se tiene un control casi total de la identidad de una persona.

*Trabajo realizado por Mario Rodríguez y José Manuel Pérez