18 de junio de 2014

A la caza de pseudocientíficos 2 (Carlos Torregrosa y Daniel Tapias)

“Hay que tener la mente abierta pero no tanto como para que se nos caiga el cerebro” – Richard Feynman


La pseudociencia, a día de hoy, está muy extendida por la sociedad, pues hay mucha gente que cree en lo sobrenatural. En principio no hay nada de malo en esto, pero en ocasiones  puede ser bastante perjudicial para las personas que “tienen la mente demasiado abierta”. Sin ir más lejos, el 13% de la población de Estados Unidos cree que existen personas con poderes sobrenaturales, con un porcentaje de mujeres superior al de hombres. Resulta curioso que exista esta distinción de género. Diversos estudios apuntan a que los hombres supersticiosos tienden a creer en OVNIS o en conspiraciones gubernamentales, mientras que las mujeres creen más en el tarot, el horóscopo y demás lecturas del futuro, dado que son más comunes en revistas de público femenino.


Sylvia Browne, Leigh Catherine, Uri Geller y Sandro Rey son del tipo de personas que se valen de diversos métodos, tales como lectura en frío e ilusionismo, para ganarse la confianza de sus clientes y así hacer creer que tienen poderes sobrenaturales. Por suerte, también hay otras personas que se dedican a desenmascararlos, y en este artículo vamos a actuar como ellos, es decir, a demostrar que son fraudes y por tanto no tienen poderes sobrenaturales.


     1. Demostración de que los zahories carecen de poderes
Un zahorí es un persona que busca agua con la ayuda de un palo. También se les atribuye la capacidad de poder encontrar metales con su palo. James Randi y otro trío de escépticos retaron a los zahories a que demostraran que tenían poderes, y si lo conseguían, podían recibir una suma de 40.000 $. Los zahories aceptaron pasar una prueba que consistía en localizar la tubería por la que pasaba agua entre 10 posibilidades, o encontrar la caja que contenía un metal valioso entre 10. En ambos casos, la probabilidad de éxito era del 10%, que es un porcentaje muy pequeño, que es bastante difícil si no se tienen poderes. Pero los zahories fallaron la prueba. De los 111 intentos que hicieron tan sólo localizaron la tubería o caja correcta en 15, es decir, que tuvieron un 12% de aciertos. Aquí está la prueba completa: 
Ahora llegamos al punto en que nos hacemos una pregunta interesante: ¿Cómo es que los zahories generalmente acertaban al encontrar agua subterránea bajo el suelo australiano, y en la prueba no lo consiguieron? En el vídeo anterior se responde a esa pregunta. Este es un mapa de Australia y la superficie coloreada en azul son las zonas con agua subterránea.  Se puede observar que es difícil que un zahorí se equivoque al buscar agua subterránea en Australia. Sin embargo, en la prueba fallaron debido a que tenía una localización geográfica en otro lugar con mucho menor porcentaje de aguas subterráneas.
https://lh3.googleusercontent.com/toG6kEknlGKX2vhHa0PFH7ShjgXkNn8OyJoVWVtGUlJIDsy0tzE1geBYUNtJq3qT-6joF5sECO-X8AWQ9pEk1lRnGU5fYyRA-MklkBtog1IQF8KmaM1G9fwlZszpokfVbQ


No obstante, los zahoríes continúan creyendo que una entidad divina les ha otorgado poderes mágicos, lo que significa que creen en ellos mismos. Entonces, ¿deberíamos considerarlos estafadores? La respuesta es no, pues no todos los pseudocientíficos estafan, sino solamente los que hacen creer a los demás que tienes poderes para sacar beneficios económicos.


2. Poderes mágicos de los pseudocientíficos
A continuación describiremos tres personas que dicen tener poderes, pero son farsantes muy conocidos actualmente. Además explicaremos su forma de estafar a la gente.


Sylvia Browne:


La recientemente fallecida, Sylvia Browne, afirmaba poder comunicarse con el mundo de los muertos. Con cada cliente cobraba nada más y nada menos que 700 dólares por sesión, las cuales podían durar como máximo 20 minutos y generalmente se hacían por teléfono.
Esta enigmática señora empezaba sus sesiones diciendo al cliente el nombre de su ángel de la guarda y luego se “comunicaba” con sus familiares difuntos. El cliente recibía gratificantes noticias del estilo a “ellos te siguen queriendo mucho”, “dicen que están muy a gusto en Cielo”... Es curioso que todos estos médiums no invoquen a personas que vengan del Infierno, sólo del Cielo.
La fama de esta señora fue aumentando conforme pasaban los años. Incluso se autoproclamó también como vidente. ¿Pero quién acudiría a una mujer que va soltando monsergas y nos cuenta cosas que son demasiado evidentes? Sin ignorar los 700 dólares por sesión... Pues resulta que una de sus fuentes de ingresos principales era la gente desesperada.
En un caso particular, trabajó para unos padres cuyo hijo había sido secuestrado. Pagaron a Sylvia por una sesión en la que ella les dijo que el secuestrador era de piel oscura, más bien hispano, que su hijo estaba muerto y la localización del cadáver de su hijo. 4 días después se encontró al hijo de esta pareja, que estaba vivo. Se capturó al secuestrador, que era de piel blanca. Evidentemente, el cuerpo del hijo no estaba en la localización señalada.
De esta mujer tan solo cabe mencionar dos cosas más. La primera, Sylvia Browne decía que si se trataba un caso o investigación policial, entonces trabajaría gratis, pero esto resultó no ser cierto, ya que al parecer seguía cobrando la tarifa habitual de 700 dólares. La segunda, Sylvia Browne aceptó la prueba que había propuesto James Randi sobre el millón de dólares, que consistía en demostrar la existencia de algo sobrenatural. Poco antes de empezar el desafío, se retiró.


Aquí hay dos vídeos interesantes sobre Sylvia Browne:


Uri Geller:


Este hombre fue muy famoso en décadas anteriores. Uri Geller es un mago conocido por hacer cosas tales como doblar una llave, partir en dos una cuchara disolviendo el metal con sus dedos o dibujar lo mismo que tú, pero sin mirar. Impresionante ¿verdad? Estos son los mismos trucos que hacen muchos magos, la diferencia está en que ellos reconocen que es un truco, una ilusión. Mientras que este hombre decía abiertamente que hacía auténtica magia. Esa es la razón por la que, a pesar de haber sido descubierto haciendo trampas en numerosas ocasiones a día de hoy, es rico y sigue teniendo muchos seguidores.
Como estamos a la caza de pseudocientíficos, vamos a explicar brevemente en qué consistía uno de sus juegos, probablemente el más curioso de todos:
Este truco consistía en que Uri Geller se tapaba los ojos mientras un espectador dibujaba algo a sus espaldas. A continuación Uri Geller dibujaba lo mismo que este espectador (con algunas diferencias con respecto al dibujo original). De forma que quedaba algo así:

PSEUDOCIENCIA2.png
Un curioso truco, sin embargo lo que Uri Geller hacía al darse la vuelta y taparse los ojos era esto:
PSEUDOCIENCIA3.png
Como podéis ver, usaba unos cristales que funcionaban a modo de espejo para ver lo que el espectador estaba dibujando a sus espaldas.
James Randi demostró que este hombre no era más que otro farsante, poniéndole a prueba en un show de televisión. La prueba consistió en ponerle delante un montón de objetos que él debía manipular. La diferencia con respecto a sus shows es que los objetos no los ponía Uri Geller. Dichos objetos consistían en cucharas y en un grupo de pequeños recipientes metálicos de los cuales algunos contenían agua y otros no. Como se muestra en esta imagen sacada del documental:
La prueba consistía, evidentemente, en manipular las cucharas y en separar los recipientes que tenían agua de los que no. Por lo que, al no ser una persona con poderes auténticos, fracasó en la prueba y quedó en evidencia delante de todo el mundo.
Es sorprendente la cantidad de fans y seguidores que sigue teniendo, pese a haber quedado como un fraude.
Aquí más trucos de Uri Geller descubiertos por James Randi:


Sandro Rey
No todos los tarotistas y mediums son extranjeros. En España tenemos uno muy conocido llamado Sandro Rey. Con unos 13.900 seguidores en twitter, este hombre hace programas nocturnos en La Sexta, en los que la gente le llama y él les dice lo que deben hacer.
Hemos leído testimonios de personas que han acudido en su ayuda, y decían que la llamada le costó ni más ni menos que 60 €. Normalmente, este hombre hace uso de la lectura en frío, un recurso muy utilizado por estos farsantes, que consiste en dar una visión muy generalizada y casi evidente de lo que está pasando. Preguntando sutilmente, el propio cliente le da las respuestas. Y es que, al fin y al cabo, estas personas solo esperan oír lo que quieren oír, reproduciéndose diálogos así:


+ Al habla Sandro Rey, ¿nombre por favor?
- Eusebia
+ ¿Qué le preocupa Eusebia?
- Yo le llamo por mi marido.
+ Su marido se lo está haciendo pasar mal, ¿no?
- En realidad, mi marido ha muerto.
+ Ya, pero… ¿a que eso se lo está haciendo pasar mal? Lo mejor es que se olvide de su ausencia.
-Vale, gracias.
+ Bendiciones.


Y con una llamada así ya es 60 € más rico.
Por supuesto, su programa no sería tan famoso si no incluyese novedades cada cierto tiempo. Recientemente, por ejemplo, inventó una sección conocida como “Ronda Express”. En ella, cada persona permanece a la espera de su turno para comunicarle su problema. Cuando este momento llega, le explican qué les quita el sueño y Sandro rey da una respuesta. Antes de que puedan replicar si tiene razón o se ha equivocado, ya les han cortado la llamada con otra persona.
Otra innovación interesante son las gafas que vemos en la foto de arriba. Según se decía en el programa, eran unas gafas inventadas por unos científicos, las cuales estimulan la actividad cerebral y facilitan a Sandro la lectura del futuro.
No olvidemos que Sandro Rey nunca se equivoca, sino que él dice lo que va a pasar y, o bien no se le ha interpretado correctamente, o bien el oyente no le quiere entender.
Por último, dejo aquí un link a un vídeo donde podemos ver algunas pifias. Por desgracia, sabe acompañarlas con un comentario medianamente inteligente, con el que escaparse del problema.



3. Métodos usados por los pseudocientíficos


Lectura en frío: Es el método más frecuentemente un método utilizado por magos en sus espectáculos o por gente que se atribuye poderes psíquicos y sobrenaturales. Consiste básicamente en que la persona que dice tener dichos poderes le explica a la otra persona sus problemas. Son problemas comunes, que tenemos todos. En función de cómo reaccione la otra persona a estas afirmaciones (no tiene porque ser verbalmente, también pueden ser con gestos corporales como el temblor de las manos) el pseudocientífico intuye si lo que ha afirmado es cierto o falso y de esa forma se irá haciendo a la idea del tipo de persona con la que está hablando. A continuación describiremos el procedimiento que realizan:


1.     El sujeto con el que va a hablar de entre el público es meticulosamente seleccionado, tratando de evitar a los escépticos. Cuando dicen frases increíbles, observan el modo de reaccionar del público y así descubren a los que son más crédulos. Así por ejemplo, el farsante le dice al público cosas como: “Los espíritus me dicen un nombre” o “Los espíritus me dicen que alguien tiene aquí serios problemas matrimoniales”. Cualquier crédulo se sorprendería al ver que un hombre ha adivinado los problemas que tiene en casa, sin darse cuenta de que ésto le pasa a todo el mundo. Tras esto, el pseudocientífico escoge a uno de los sujetos que han reaccionado de forma crédula.


2.   A continuación el vidente, tarotista, mago, etc. estudia el aspecto de la persona para obtener más información sobre ella, además de la que ya ha conseguido antes, mirando si tiene anillo de casado, como viste, como habla... De esa forma, iniciará la lectura en frío. Con toda la información que ya ha obtenido del espectador, puede lanzar afirmaciones menos generales, con más confianza. Pero el espectador no se da cuenta de que al mismo tiempo está sonsacando más información. Es posible que se equivoque con una afirmación, pero el error pasará desapercibido si sabe corregirlo ágilmente.


3.  Una vez ha conseguido toda la información necesaria sobre esta persona, empieza a darle consejos sobre lo que debe hacer para mejorar.


Pero los magos no se dan cuenta de que esta técnica conlleva varios riesgos para el espectador: abrir heridas emocionales, hacer recordar a la persona momentos de su vida que desea olvidar, exponer ante el público aspectos o momentos de la persona privados, etc. Pero ya hemos visto que hay muchos farsantes a los que no les importa el mal que puedan causar, porque sólo lo hacen por dinero.


James Randi


Para finalizar, hablaremos de uno de los escépticos más famosos que existen. Este hombre de 85 años aún sigue desenmascarando a gente charlatana y mentirosa como los que figuran en este artículo. Es mundialmente conocido porque ofreció en 1996 un premio de 10.000 dólares a quien demostrara científicamente algo sobrenatural. Posteriormente, aumentó la cifra del premio a un millón de dólares, pero aún no ha habido nadie capaz de ganarlo. Muchos no se presentan porque dicen que si ganaran, James Randi no les daría el dinero; otros porque dicen que Randi es demasiado escéptico como para creerse las pruebas. Pero todos los que lo han intentado (como los zahoríes) han fallado. Las pruebas a las que los someten son completamente justas y sin trampas. No olvidemos que, si alguien tuviera poderes reales, ya habría conseguido el premio hace tiempo, ¿no creen?
En este vídeo, tres personas que afirman tener poderes sobrenaturales aceptan el desafío del millón de dólares de James Randi.
En este otro vídeo, Leigh Catherine (otra médium conocida) habla sobre sus poderes con un escéptico y acepta el desafío de ganar el millón de dólares de James Randi (algo que, curiosamente, nunca llega a hacer).


En conclusión, existen multitud de personas que intentarán estafarnos económicamente. Para algunos es fácil diferenciar entre a quién creer y a quién no. Sin embargo, hay otros más crédulos que confiarían antes en un médium que en un científico. Hay que tener cuidado con estos estafadores, porque no les importa el daño que nos puedan hacer.


Fuentes de información:


Zahories:


Sylvia Browne:


Uri Geller:


Sandro Rey:


Desenmascarados:
http://www.randi.org/site/index.php/component/content/article/58.html

1 comentario:

Unknown dijo...

Citar correctamente se refiere a seguir ciertas normas como las que os conté mediante la presentación que hay a vuestra disposición en la propia tarea.